Cuerpos Danonino

ASADO en un caso verídico que me refirió un amigo. Resulta que este amigo de toda la vida, tiene un hijo que acude dos días en semana a una actividad extraescolar que denominan gimnasia pre-deportiva. Parece ser que esta actividad consiste en introducir a los niños en el mundo del deporte por medio del juego. Así dicho parece de lo más divertido, y sano a la vez. El caso es que para fomentar la actividad física entre los padres, porque de lo que se ve se aprende, tres días al año los progenitores A, B o ambos, son invitados a participar de los juegos. Esta participación no resulta ser muy inocente, pues lo habitual es que mientras el niño/a corre, el progenitor/a (A o B) suele hacer abdominales, flexiones o algún que otro espatarramiento. El espectáculo tiene que ser de lo más impresionante. Hay que imaginarse treinta Cuerpos Danoninos, porque más que de tipos lights estamos hablando de modelos bastante más cremosos, resoplando y gimiendo porque acabe la cuenta atrás. Por no hablar de esos benditos abuelos que se hacen cargo de las criaturitas hasta que sus hijos vuelven a casa. Con todo y eso, según mi amigo, la experiencia más inolvidable fué cuando dividieron a padres e hijos en dos bandos, los pusieron unos frente a los otros en ambos extremos del pabellón, y a la voz de ya les ordenaron correr hasta el extremo opuesto para ver qué equipo, el jóven o el senior, cruzaba antes la pista de parte a parte. Sus palabras fueron más o menos así. --Te aseguro que ver acercarse hacia ti treinta o más hormigas atómicas sin miedo a interceptarte, todas con la cabeza a la altura de tus cojones, es algo que jamás podrías olvidar. Tienes que reaccionar rápido y esquivarlas, no por no hacerles daño, sino para ellos no acaben contigo--.