Contra el cambio climático

IENTRAS R. Toharia, otrora director del Muy (poco) Interesante, insiste en que entendamos que no es lo mismo tiempo que clima, les relato unos sucedidos que me dejan un poco cariacontecido en cuanto al modo de ser del Homo Sapiens Sapiens.

Viernes 12. 17.45 horas. Delante de un estanco una plaza de aparcamiento en batería libre. Se aproxima un vehículo, enciende las luces de emergencia y estaciona en doble fila bloqueando además el acceso al hueco. El conducor se apea y entra en el estanco a comprar tabaco y/o sellos (se me antoja).

Sábado 13. 20.15 horas. Delante de un cajero automático una plaza de aparcamiento en batería libre. Se aproxima un vehículo y estaciona en doble fila en la acera del enfrente. Se apea el conductor, cruza la calle haciendo caso omiso del paso de cebra situado a escasos cinco metros y se aproxima al cajero, no se si a sacar dinero o transferir fondos a su idem de pensiones. El acompañante permanece en el vehículo retocandose el maquillaje.

Domingo 14. 21.50 horas. Junto a unos cubos de basura una plaza de aparcamiento en batería libre. Se aproxima un vehículo y estaciona en doble fila bloqueando además el acceso al hueco. El conducor se apea y deposita ciertos residuos en cierto contenedor.

Lunes 15. 19.35 horas. Frente a mi casa una grua municipal retira un vehículo aparentemente bien estacionado pero con aspecto de estar abandonado. A escasos cinco metros una fugoneta en doble fila bloquea la salida de tres vehículos correctamente aparcados. Los agentes municipales se afanan en la retirada del primer automovil e ignoran el segundo, cuyo conductor toma un chato de vino o dos en el bar contiguo.

Martes 16. 19.20 horas. Una furgoneta aparcada en batería, invade un metro de acera para no sobresalir del resto de los coches aparcados y no entorpecer así la libre circulación de vehículos. Justo en frente una explanada de unos 10.000 metros cuadrados habilitada como aparcamiento luce semidesierta.

Miercoles 17. 21.05 horas. Para que vean que no tengo mania a los chóferes. Deposito mis residuos orgánicos en el contenedor correspondiente, en el que me encuentro con sorpresa unas 20 botellas de vidrio (de vino) vacías. El contenedor apropiado está situado a un metro.

Y ahora una para que piensen y se rían. En una desapacible noche, con ventisca, granizo, rayos y truenos, nuestro sujeto conducía su Smart (4two) extremando las precauciones. En estas estaba cuando ve que en una parada de autobús (que a esas horas ya no circula) esperan pacientemente: su mejor amigo, a quien debe la vida; una adorable ancianita, con signos inequívocos de necesitar ser atendida en ungencias; y la ex-sargento de la U.S.A.F. Michelle Manhart, de profesión actual sus tetas. ¿ Qué hará nuestro hombre para quedar como un auténtico caballero con esos tres personajes ? La respuesta, si no la adivinan antes, la daré mañana. Boas noites.